La mejor manera de demostrarse amor propio, si estas soltero y si quieres tener un compromiso infinito es; casarse con uno mismo
Un nuevo fenómeno social, está de rabiosa actualidad inundando las redes sociales de noticas al respecto, y es sobre las ceremonias de auto matrimonio, es decir lo que se conoce como: Sologamia, donde cada vez más personas optan por declararse matrimonio consigo mismos en una celebración (no oficial) por todo lo alto. Es una excusa perfecta para aquellas personas que fueron a las bodas de todos sus amigos, que están cansados de invertir dinero en regalos ajenos, y encuentran en esta excentricidad unido a un gran sentido del humor, una manera de compensar todas esas inversiones, ¡ahora que sean los demás quien tengan un detalle con el soltero del grupo! ¿no?.
La sologamia es cuando una persona soltera no tiene pensado compartir su vida con nadie, y mediante una fiesta de enlace lo profesa a los cuatro vientos, y sobre todo a sus familiares y amigos.
Aquellos que hayan visto la película de La Boda de Rosa, dirigida por Icíar Bollaín (2020 y protagonizada por Candela Peña) no les sonará raro este nuevo término, ya que, en esta película, la protagonista de 45 años, decide celebrar una boda consigo misma.
Si todavía no te han invitado a una boda de este tipo, no estás libre de asistir este verano o quizás a lo largo del año, en este artículo de desarrollo más sobre el tema.
Los beneficios
Actualmente no existe validez legal para este tipo de matrimonios de sologamia, no tienen beneficios fiscales ni te ofrecen unas vacaciones extra en el trabajo, ni tienes descuento para hacer un “viaje de luna de miel”. Esta tendencia representa un acto de autoestima elevado al infinito, es un ritual de amor y de auto aceptación, que seguramente sin tener que hacer toda esa parafernalia, todos deberíamos, alguna vez en la vida, realizar una fiesta de este tipo, es decir, de AUTOAMOR.
Esperemos que con el incremento de este tipo de eventos, y del transcurrir del tiempo este vacío legal termine de llenarse porque cada vez existen más mujeres las que deciden asumir este compromiso.
Las ceremonias de este tipo, incluyen todos los detalles que aparecen de una boda tradicional; vestidos nupciales, votos matrimoniales, llevan madrina y padrino de boda, se compran anillos de compromiso, hay lista de invitados, y regalos, y como no puede faltar se disfruta de un banquete y mucha fiesta.
Pero ¿quién corre con los gastos de todo eso? Generalmente el banquete lo pagan los invitados, pero lo adelanta quien se casa (igual que en una boda tradicional) el resto de los objetos que se necesitan suelen ser regalos o corren por cuenta de la persona sologama.
La sologamia no significa querer estar solo eternamente, sino en tener la capacidad de no depender de nadie, y en no dejar que nadie te quiera menos de lo que te quieres tú.
¿Por qué es buena idea casarse con uno mismo?
Hemos crecido con creencias equivocadas sobre el romanticismo, donde si no has encontrado tu media naranja a cierta edad, se supone que no serás nunca una persona completa, afortunadamente eso empieza a revertirse y después de llevarse alguno que otro “chasco” en el amor, las personas independientes económicamente y posiblemente con un cierto elevado nivel intelectual, valoran más otros aspectos que compartir su vida al lado de una pareja.
La felicidad de uno mismo no depende de los demás, algo que alcanzas a entender cuando llegas a la madurez, sobre todo son más las mujeres que comienzan a darse cuenta de esto, por eso son las que más practican la sologamia.
Los que conciben la sologamia como la opción más equilibrada para auto regalarse afecto porque han asumido un compromiso de respetarse y quererse sin esperar nada de nadie, alcanzando casi la iluminación del amor más puro desde la interioridad.
Las razones por las que alguien quiera casarse solo consigo mismo, pueden ser:
- Se han desilusionado de las relaciones tradicionales, seguramente ya han pasado por alguna ruptura dolorosa.
- Están rodeadas de amistades que se han divorciado y han observado traiciones que les han hecho no creer en los matrimonios tradicionales.
- No quieren conformarse como sus amigas, de vivir al lado de alguien por no estar solas y buscan tener libertad para hacer lo que les dé la gana.
No depender de nadie
Quienes observan estas actitudes desde afuera, pueden pensar que los sologamos son personas solitarias y ególatras, que no saben compartir.
En realidad, es una crítica que hacen los propios solteros, hacia las parejas y matrimonios que permanecen juntos de manera tóxica y por miedo a la soledad, que cree que quedarse solos sentimentalmente, es ¡todo un fracaso!, por lo que aguantan lo inaguantable en una relación de pareja. En países como Japón o EEUU, llevan más de 10 años con este tipo de bodas, existen numerosas empresas que organizan estos eventos.
Ojalá nos comprometiéramos con los mismos votos que dicen los sologamos, y que nos repitiéramos de vez en cuando algo así como:
“Yo me tomo a mi como mi legítimo(a) esposo(a),
Me comprometo a mimarme, quererme y respetarme cada día más,
renuncio a auto sabotearme, a tener pensamientos intrusivos negativos
y dejarme arrastrar por la decepción,
ahorraré para huir de la pobreza, me centraré en fomentar mi riqueza espiritual.
Procuraré tener salud para alejarme de la enfermedad,
de ahora en adelante me prometo tratarme con amor y me honraré cada día.
Seré siempre lo más importante de mi vida, para bien o para mal,
me cuidaré y amaré hasta que la muerte me lleve.”
Artículo escrito 20 julio 2024 para El Progreso de Lugo